
Nuestras Leyendas
Lawin, el hombre se hierro
Daniel Alexis Gómez 401
Una noche de lluvia un hombre salió de su casa, fue a la tienda para comprar unos cigarrillos. Al salir de ahí, le cayó un rayo maldito. Desde ese día, se volvió el señor Lawin, el hombre de hierro con un hueco en el corazon. Se volvió malo, muy malo porque mataba a la gente para enterrarla en el piso de las cuevas. Cuando se volvían huesos las sacaba para convertirlas en oro.
Un día de luna llena, Lawin murió, espíritus de gobernaron el mundo. Y Lawin gobernó el infierno.
El borracho solitario
Por Kevin Bernal (401)
Hace 100 años existía un hombre a quien le decían el borracho, porque siempre estaba en en la cantina. Al llegar a casa maltrataba a su esposa y a su hijo pegándoles muy fuerte.
Un vez los encerró en un cuarto sin nada para comer, espero tres días para sacarlos de la habitación, pero se dió cuenta que su esposa y su hijo habían muerto. A el no le importo nada, boto los cuerpos y siguió tomando todos los días hasta que se le acabo el dinero.
Un día se fue a la cantina y peleó con un hombre que saco un arma, le disparó y lo mato. Pero después de que lo mato, la cantina empezó a derrumbarse y los que estaban en ella escuchaban una risa espantosa. En ese momento el se convirtió en el hombre sin alma y cuándo los hombres voltearon a mirar, era solo huesos.
El tomaba wisky y se convertía en lo que quisiera, andaba por los bares, tomaderos y cantinas para aparecerse a lo hombres borrachos y abusivos con su familia. Y si ellos hacían lo que él había hecho, les ponía a cargar una roca por toda la vida.