Pensar en los procesos de aprendizaje y enseñanza como un acto comunicativo entre los protagonistas, sus saberes, los conocimientos y el mundo, implica reflexionar sobre la necesidad de contextualizar y percibir más allá de las teorías o mallas conceptuales la escuela, es decir, empezar a entender el para que se aprende, cuales son los propósitos del aprendizaje y como pueden hacerse prácticos en la vida cotidiana.
Resulta complejo y sesgado interpretar los resultados de pruebas estandarizadas, sin visibilizar los contextos en los que han sido aplicadas y los imaginarios que sobre el conocimiento, la escuela y la evaluación han construido y construyen los y las estudiantes.
royecto de vida.
Por esto es importante, considerar la oportunidad de brindar experiencias de aprendizaje en diferentes territorios de la ciudad o en distintas realidades, de tal forma que nuestros y nuestras estudiantes amplíen sus visiones de mundo y reconozcan el conocer desde diferentes ópticas. Motivándoles así a superar las dificultades para comprender, analizar y razonar algunas situaciones, o para expresar a través del lenguaje oral, escrito o gráfico lo que se conoce, imagina o vive.
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Teniendo en cuenta que nuestro PEI: “La comprensión del arte, la ciencia y la tecnología para la construcción de un proyecto de vida con trascendencia, Las expediciones Pedagógicas se convierten en un movilizador del mismo, pues es necesario conocer los fenómenos del mundo y nuestra participación en ellos, para una construcción pertinente del proyecto de vida.